viernes, 26 de agosto de 2011

Sexcall... ¿Cual es tu mayor fantasia sexual? - Capitulo 37


Hola!!. Subo capitulo nuevo para ya poder ir terminandola. Besos!!

Summary: ¿Por qué el cielo me odia? Justo en mi último día de trabajo este infierno se convirtió en mi paraíso. ADVERTENCIA, contiene material para mayores de edad.

Capitulo 37


Edward POV

- ¿Dónde? – hable por inercia porque aun no terminaba de procesar lo que había escuchado

- En la cárcel central… ¿Puedes venir por mí? – su voz sonó casi como un susurro imperceptible

- Voy para allá

Sé que fui rudo, pero es que estaba en shock, colgué el teléfono y me lo quede mirando por un par de segundo.

¿Por qué mierda mi novia estaba en la cárcel?

¿Qué paso con Alice?

Cuando pude reaccionar guarde rápidamente mi teléfono celular en mi bolsillo y me gire hacia la puerta.

- ¡Hijo! – me llamo mi padre - ¿Qué pasa con Bella?

- Esta detenida, tengo que ir a buscarla

No me quede a ver la expresión de mi padre y solo me preocupe de llegar luego donde mi novia, seguramente como es Bella debía estar histérica y quizás hasta que cosas le había hecho Alice.

Cuando llegue a la cárcel estacione sin fijarme bien donde lo hacía, entre a la estación policial como alma que lleva el diablo.

- Buenas tardes – salude al oficial que estaba detrás del escritorio – vengo a buscar a Isabella Swan

- ¿Ya? - ¿acaso vi decepción en su mirada?

- Si – le fruncí el ceño – si hay que pagar algo o…

- No tranquilo Edward – me hice un gesto despreocupado

Un momento…

¿Cómo sabe mi nombre?

- ¿Cómo sabe mi nombre?

- Hola – me estiro la mano, dude un poco en tomarla al principio pero igual lo hice – soy John un amigo de Charlie

Bueno, por lo menos eso aclaraba un poquitito las cosas.

- Si… pero – fruncí el ceño aun confundo – ¿Charlie mando a detener a Isabella?

- No – negó con la cabeza – a Isabella la detuvimos por desordenes en la vía publica con… - sobre su escritorio había un montón de papeles en los cuales comenzó a rebuscar – Alice Brandon… la verdad es que esta chiquilla sí que está loca, ya decidimos dejarla aquí toda la noche… ¿Puedes creer que le agarro las bolas a uno de mis oficiales? – se rio con muchas ganas – a otro ofreció hacerle sexo oral con tal de que la dejara ir – se puso serio de repente, parecía que estaba pensando algo – quizás deberíamos levantarle cargos por acoso sexual o intento de soborno, o quizás…

- Entendí – lo corte - ¿Puedo llevarme a Isabella? – mi pregunta sonó bastante desesperada

- No se – frunció el ceño – Charlie me dijo que ella siempre ha sido tan correcta y que pasar una noche en una fría celda es una experiencia que hay que vivirla asi que… - se encogió de hombros

- ¡Eso es estúpido! – rugí golpeando el escritorio

- Chico – me apunto con un lápiz - ¿Has estado encerrado alguna vez?

- No – lo mire raro, no sabía de que venía todo esto

- Bien – vi como dirigía su mano a un pequeño timbre sobre el escritorio

En cosa de segundos dos policías aparecieron en escena, se pararon firme detrás de John esperando, por lo que supuse yo, serian sus órdenes.

- Apresen al caballero por favor – no se me sorprendió mas su orden o el tono que uso para darla

- ¡NO! – rugí – además… ¿Bajo qué cargos me detendrá?

- Elegí – comenzó a enumerar con los dedos – desacato a la autoridad pública, amenaza a la autoridad pública – siguió enumerando – o… porque si – se encogió de hombros – ahora llévenselo por favor

- Si señor

Los dos policías se acercaron a mí y antes de que pudiera siquiera reaccionar me esposaron con las manos hacia atrás.

- ¡No pueden hacer esto! – pensé en forcejar pero volví a pensarlo y me arrepentí

- Llévenlo junto a la chica del póker

- Entendido

¿Chica del póker?

Me comenzaron a guiar por unos pasillos hasta que unos gritos furiosos se escucharon claramente.

- ¡NO!... exijo otra oportunidad

- ¡ESTO ES TRAMPA!

- Vamos caballeros – recocí al instante esa musical voz – les daré otra oportunidad mas pero sinceramente ya no se que pueden apostar

Cruzamos la última esquina y antes mis ojos me encontré con la mejor imagen de mi vida, Bella sonreí mientras comenzaba a barajar con demasiada habilidad una baraja de cartas, sensual y hermosa a la vez.

- ¡Edward!

Dejo las cartas de lado y se colgó de mi cuello, la hubiera abrazado pero mis manos estaban ocupadas siendo retenidas por las esposas.

- ¿Qué…? – se separo de mi para observarme mejor y de pronto su expresión cambio cuando se fijo en mis manos - ¿Por qué estas detenido?

- Porque nunca lo he estado – me encogí de hombros

- Esta es la venganza de Charlie – me apunto con su dedo – esta es su venganza porque lo descubrimos teniendo sexo

Frustrada se dio vuelta u volvió a entrar a su celda donde se sentó en uno de los bancos, la seguí y desde adentro observe mejor la mesa de póker que habían armado algunos oficiales y ella.

- Bueno – me encogí de hombros y me senté junto a ella – por lo menos estamos juntos en esto

- Te amo – me beso con algo más de pasión, sentí como mi cuerpo comenzaba a reaccionar así que preferí cortar el beso – no tendrías que soportar las locuras de Charlie

- ¡Señores! – llamé la atención de todos los que estaban atentos a nosotros - ¿Una partida de póker?

Dejamos literalmente en calzoncillos a los policías, tres machos fuertes y acostumbrados a las cosas pesadas perdieron y suplicaron cuando con mi novia los dejamos en su ropa interior, por lo menos conseguimos unas cuantas mantas y matar algo del tiempo que teníamos que estar acá.

Ya todos se habían marchado a seguir con su labor, a mí por lo menos me permitieron una llamada para avisar a mi padre que todo estaba en orden y que no volveríamos a trabajar tampoco. Decimos rendirnos, porque quizás quien viniera a buscarnos terminaría por acompañarnos también.

Ahora estaba acurrucado junto a mi novia en un estrecho catre, por lo menos también habíamos ganado sabanas limpias así que estaba algo más tranquilo sobre contagiarnos de algo.

Bella suspiraba acompasadamente, claro indicio de que estaba en el mundo de los sueños, lamentablemente yo no podía acompañarla porque su hermoso culito estaba sobre mi miembro que hace unos minutos que estaba en proceso de despertarse. Con los dientes apretados y la imagen de Renée y Charlie teniendo sexo trate de bajarla, pero no estaba dando resultado.

- Mmm Edward – era idea mía o Bella acaba de gemir

Nop, no solo gimió sino que además acaba de restregar su culo en mi ya muy dura polla, cerré los ojos pero ya nada lograría bajar mi excitación.

- Así – volvió a gemir y moverse – justo ahí… - sus manos ahora comenzaron a pasarse por mi pecho – así como me gusta

No aguante mas, así que la gire posicionándome sobre ella, y aun con ella dormida impacte mis labios en los suyos, su respuesta fue inmediata pero solo cuando nuestras lenguas se entrelazaron es que la sentí despertarse por completo.

- Edward…

- Lo haremos rápido y silencio – le aclare antes de que preguntara

Sin tiempo para preliminares ni nada por el estilo baje mis labios a su cuello, por mucho que sabía que no podía gemir alto, lo hizo, así que lleve mi mano derecha y la puse sobre sus labios.

- Quieta – murmure sobre su cuello

- Quiero… - se volvió a revolver entre mis brazos – necesito tenerte… adentro… ahora

Casi lloriqueo, así que como bueno novio que soy no la quise hacer esperar más.

Guie mis manos hacia abajo y en el estrecho espacio logre liberar mi erección de mis molestos pantalones, solo los baje los necesario, con Bella hice lo mismo, la denude solo lo indispensable.

No espere mas y de una sola estocada estuve en su interior, me apresure a besarla para acallar los gemidos que ambos estábamos produciendo.

- Oh nene – gimió en mi oídio – esto es putamente excitante

- ¿Si?... ¿Te excita que puedan vernos – la embestí con mucha más fuerza – o vernos?

- Si… - cerro los ojos con fuerza – me gusta siempre que seas tu el que me lo haga

- Bien

Quería sentirla más cerca así que como pude tome una de sus piernas y la enganche en mi cadera, pero no era suficiente, así que decidí cambiar un poco, me salí de su interior y la gire para que yo queda detrás de ella, con mi pecho pegado a su espalda y ahí, sin previo aviso volví a hundirme en ella, pero esta vez la sentí mucho más adentro.

Los movimientos era apenas imperceptibles, nunca había probada esta posición y la verdad es que con el espacio era ideal.

Sentí como su caliente interior se contraía así que fue mi señal para aumentar el ritmo, en pocos segundos un fuerte orgasmo la azoto, probando que mordiera mi brazo derecho, con ese caníbal gesto la seguí y explote en mi propio orgasmo.

- Genial – murmuro – simplemente genial

- Yo tengo solo una cosa que decir – suspire aun cansado

- ¿Qué cosa? – me miro hacia atrás

- Gracias Charlie Swan

Nos reímos y volvimos a fundir en un cálido beso.

_____________

Besos, Joha!!

5 comentarios:

  1. no me canso de volver a leerla....  jajajajajaja

    que calor no??

    besos JOHA....

    ResponderEliminar
  2. Yo tampoco me canso de leerla, fantástico

    Besotes

    ResponderEliminar
  3. este capi es el que mas me gusto mas cuando meten a Edward a la carcel jajaja
    me encanta y nunca me cansaria de leerla
    Besitos :D

    ResponderEliminar
  4. diablos ni en la carcel... Degenerados los amoooo...

    Joha felicitaciones de new

    ResponderEliminar

Image and video hosting by TinyPic