No Hay Tiempo - Capitulo 15

Hola!!. Chicos, nuevo capitulo. Estoy terminando el adelanto de AMM. Besos!!

Summary: ¿Que pasaria si no fuera solo Edward quien ocultara un secreto? ¿Y si Bella ocultara algo que ni ella misma alcanza a comprender?... ADVERTENCIA, contiene material para mayores de edad.

Capitulo 15

En el fondo de lo que sea que tenga en lugar de alma, me estaba muriendo, no encontraba forma de que mi relación con Bella funcionara, seguramente cuando ella estuvo con mi primo también pasaron por esto, quizás él también le planteo la idea de convertirse y aunque ella me dijera que por mi si era capaz, ¿Seria yo capaz de quitarle su humanidad?, frote mis gélidas manos y después de tomar fuerzas la miré.

- ¿Qué pasa? – su rostro cambio a uno de cierto grado de pánico al ver que no obtenía respuesta de mi parte - ¿Estas bien? – y en un gesto de lo mas dulce paso su calida mano por sobre mi fría mejilla, ahí me di cuenta que no era el momento para hablar de esto

- Te amo – no se si hubiera sido mejor decir lo otro, las palabras brotaron de mis labios sin mi permiso, aun no creo que dije esas dos palabra que en mas de 100 años nunca le dije a nadie excepto a mi biológica madre, el rostro de mi ángel rápidamente tomo toda la sangre que fue capaz de contener, a pesar del aroma que expendía, pude controlar la ponzoña que se comenzó a juntar en mi garganta – yo… no… - no sabia que decir para arreglar lo que acaba de ocurrir

- Yo también te amo – mantuvo su vista pegada al suelo, pareciera ser que sus zapatos eran mucho mas interesantes que mi rostro

- Bella – con la mayor delicadeza que pude tome su mentón con mis dedos y lo levante para poder mirar esos hermosos orbes chocolates que son capaces de perderme – no me escondas tu rostro… viví demasiado tiempo buscándote, ahora que te encontré no soy capaz de no mirar esos hermosos ojos que tienes – una rápida sonrisa se dibujo en mi rostro de piedra a lo que ella respondió con el mismo gesto

- Yo se que… a lo mejor no me crees… todo lo de Jam…

- Tranquila – pose mis manos en sus mejillas para bajarles el rojo que poseían, lo que menos quería era escuchar el nombre de mi primo en estos momentos – lo único que necesito saber es que me amas casi tanto como yo a ti

- Yo creo que más – rebatió con su tranquila sonrisa

- Yo creo que yo te amo mas – no puedo creer que este peleando con mi amada como si fuera un adolescente de 15 años – bueno… dejémoslo en un empate

- Vale – ambos nos reímos por la situación y cuando escuchamos como la gente nos hacia callar es que nos dimos cuenta que seguíamos en el cine – mejor…

- ¿Quieres irte? – ella solo asintió

La tomé del brazo y la dirigí a la salida, una vez que quedaban solo dos pasos para cruzar la puerta de la sala de cine, y todo estaba mas que oscuro, no aguanté mas, la tomé del brazo y la di vuelta hacia mi para besarla, no se sorprendió por mi gesto, creo que nunca antes me había dejado llevar de esa manera, así que rápidamente me separe de mi ángel, no quería que tuviera una impresión errónea, pero con una gran habilidad Bella salto sobre mi quedando estilo koala, cruzo sus piernas en mis caderas y juntos nuestros labios, no me demore mucho en reaccionar ante semejante muestra de cariño, rápidamente comencé a delinear el labio inferior de mi ángel con mi lengua, ella entreabrió sus carnosos labios invitándome a probarla en el extenso sentido de la palabra, acepte la invitación y una vez que nuestras lenguas se encontraron me perdí, era la mejor sensación que había experimentado jamás, por puro instinto mis manos comenzaron a buscar el inicio de la polera de Bella, una vez ahí, seguí explorando su maravillosa espalda pero ahora por sobre su piel, era tan calida a mi tacto, solo reaccione de lo que estábamos haciendo y donde cuando me tope con el broche de su sostén, en ese mismo segundo escuche lo mas maravillo que podía salir de la boca de mi ángel, fue el mejor gemido de placer que alguien me pudo regalar y el saber que era solo yo quien provocaba eso en Bella me devolvió a la realidad.

Sin quererlo me tuve que separar del beso, aunque yo no necesitara respirar eso no quería decir que ella tampoco, la baje de mi cintura y le acomode el cabello, su respiración era errática y sus ojos tenían un brillo que no le había visto nunca, parecía excitación en plenitud, si hubiera tenido sangre corriendo por mis venas me hubiera sonrojado.

- Perdón… - le tomé la mano y se la bese – es que no es el lugar… la sala – apunté hacia donde estaba la enorme pantalla de cine

- Vamos a mi casa – me tomo con la mano que le había besado y me arrastro afuera del cine.

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Besos, Joha!!