
Hola!!. Nuevo capitulo aca :) . Besos!!
Summary: ¿Por qué el cielo me odia? Justo en mi último día de trabajo este infierno se convirtió en mi paraíso. ADVERTENCIA, contiene material para mayores de edad.
Summary: ¿Por qué el cielo me odia? Justo en mi último día de trabajo este infierno se convirtió en mi paraíso. ADVERTENCIA, contiene material para mayores de edad.
Bella POV
Quería golpear a
Edward, sinceramente quería plantar mi puño en su hermoso rostro.
Un lloriqueo mas o
una queja adicional y olvidaría lo mucho que lo amo y lo golpearía tan fuerte
que se olvidaría hasta de que está enfermo.
Fuera de broma,
estaba muy preocupada por él, después de que termino de devolver todo de su
estomago estuvo con un poco de tercianas, no volvimos a quedarnos dormidos
aunque aun era de madrugada. Del tiempo que conocía a Edward nunca lo había
visto enfermo y por lo que él mismo me decía, no era de indisponerse mucho,
algún que otro resfrío cada tantos inviernos y seria todo, pero ahora era algo
más que una simple indigestión.
- ¿Si prometo darte
un buen orgasmo ahora mismo volveremos a casa?
- Por supuesto – lo
mire sonriendo, yo había tenido que conducir porque él se negó a cualquier
cosa, hasta tuve que arrastrarlo al auto – pero primero te vera el doctor
Apunte con la
cabeza el imponente edificio que estaba frente a nosotros, había mucha gente en
el estacionamiento y espera que Edward no se pusiera en su plan de “tengo 5
años y no quiero hacer nada” porque no estaba para arrastrarlo mientras todo el
mundo se burlaba de nosotros, aunque tengo que reconocer que tiene cierto
encanto tratarlo como nenito.
- Es que de verdad
lo único que necesito es dormir, conozco mi cuerpo y se que no tengo nada
- Bien – me baje y
rodee el auto hasta llegar a su lado y le abrí la puerta – si no tienes nada
nos demoraremos muy poco
- Te odio – se bajo
refunfuñando y avanzo sin siquiera esperarme
Cerré el auto y los
ojos, tenía que tener paciencia, algo me decía que esta actitud de Edward era
solo parte del estrés que lo tenía así, porque no era nada grave ¿No?
Imposible, sonreí
ante la idea, Edward es joven y sano, por supuesto que todos estos malestares
era solamente parte de mucho trabajo y poco descanso.
Cuando llegue a la
recepción lo vi sentado y cruzado de brazos, supuse que no había pedido su hora
así que me acerque a la recepcionista y confirme la hora que le había pedido,
era muy temprano así que la chica me dijo que en unos minutos nos llamaría el
doctor. Como no sabía bien que era lo que tenia, solo pedí por un médico
general, ya él lo derivaría a algún especialista si necesitaba algo mas, en
este caso creo que con una licencia y algunos calmantes estaría bien, pero yo
soy periodista no doctora.
Me senté a su lado
y solo me saco la lengua, aunque trate de controlarme no pude y estalle en
carcajadas, esta actitud tan inusual en Edward era preocupante y chistosa al
mismo tiempo.
Mire la televisión
que estaba prendida, como aun era muy temprano estaban dando las noticias,
anunciaban días de mucho calor en LA, ¡Claro!, como si hiciera poco, quizás un
día en la playa le hiciera bien a Edward, le propondría que este fin de semana
nos diéramos una arrancadita, estamos tan cerca de Long Beach que es un gran
desperdicio pasar encerrados y en el centro comercial los días de calor, tanta
gente quisiera un poco de mar y nosotros lo desperdiciamos, aunque ver a Edward
en traje de baño era un ingrediente adicional que aumentaba mis ganas por ir a
la playa.
- Este fin de
semana nos vamos a la playa – lo mire y puse mi cara de “no estoy preguntando,
estoy avisando”
- Supongo que no
puedo replicar
- Supones bien – me
acerque y lo bese castamente en los labios, cuando me separe le di una cálida
sonrisa y acaricie sus rebeldes cabellos – tranquilo amor, todo estará bien
- ¡Claro! – bufó –
como no es a ti al que le sacaran sangre
- Vamos amor – lo
moví un poco – es solo un pinchacito, además – me encogí de hombros – quizás ni
te sacan sangre
- ¡Siempre sacan
sangre! – casi grito, mire alrededor y una pareja de ancianos nos miraban y
asentían sonriendo – no sé qué piensan los médicos pero te duela lo que te
duela siempre te sacan sangre – y sí, eso sí que es verdad
- Bien – bufe
resignada, parecía una madre tratando de calamar a su nenito – si te sacan
sangre le diré que me saque a mi también así compartiremos nuestro dolor
- Dios como te amo
Me beso como si se
le fuera la vida en ellos, no es que me queje pero era un lugar público y
cuando estaba a punto de sentir su lengua rozar la mía, escuche como una voz
masculina llamaba a mi novio, el doctor pensé, así que a pesar de que no
quería, me separe de él.
- Vamos – antes de
que replicara cualquier cosa lo tome de la mano y lo jalonee a la consulta
- Hola – saludo el
doctor, debía tener unos 25 años porque se veía bastante joven – mi nombre es
Demetri – estiro la mano hacia mi primero
- Un gusto, yo soy
Isabella y él es mi novio Edward – señale a Edward que ahora ya no estaba
lloriqueando, estaba serio y con el ceño fruncido – y es el que viene a la
consulta
- Hola Edward – le
sonrió y como mi novio no le respondió tuve que salvar la situación
- Se siente un poco
mal – le di un no tan disimulado codazo en el costado
- Si… y tenemos
trabajo así que me gustaría salir lo antes posible de acá
El doctor se sentó
en su silla y comenzó a llenar una ficha con todos los datos de Edward, le
pidió que explicara todos sus síntomas y le hizo muchas preguntas, yo me
sorprendí mucho al enterarme que estaba vomitando casi todos los días y se que
a él no le agrado nada mi mirada asesina, pero eso era algo que yo necesitaba
saber.
Nuevamente casi lo
golpeo cuando le dio con que no tenía nada y que solo era estrés, yo ya no
estaba tan segura, pero menos mal que el médico no le hizo caso y le reviso.
Con el estetoscopio
le reviso los pulmones y descarto cualquier resfrío, le toco el estomago en
repetidos lugares pero cuando vio que Edward no se quejaba dijo que era poco
probable que fuera alguna infección o algo parecido, le reviso el colon
también, quizás el estrés le había afectado el color, pero al palparlo Edward
tampoco se quejo.
Vi que no era la
única frustrada cuando vi como Demetri fruncía el ceño.
Tal parecía ser que
como había predicho Edward la única solución fue sacarle sangre, casi me
carcajee cuando lo vi tragar en seco, pero el sonrió malévolamente cuando me
recordó que le había prometido acompañarlo moralmente y sacarme sangre también.
- Esto es algo que
no había visto – murmuro divertido Demetri
- Es que mi novio
es un llorón – me burle y sonríe aun mas cuando vi su mirada de odio
- ¡No soy un
llorón! – a penas y pude entenderlo porque hablo entre dientes
- Bueno Edward – el
doctor corto el momento – en la tarde te llamare por si hay algo importante
- Espero que no
llame – murmuro, creo que no quiso que lo escucháramos pero lo hicimos
- ¡Edward! – lo
regañe
- Pero es que si no
llama es porque no tengo nada – le fruncí el ceño, sabía que no lo había dicho
por eso – bueno doctor – puso una de sus sonrisas y le dio la mano – estaremos
en contacto
- Cuídate Edward –
le respondió el saludo – adiós Isabella
Iba a darle la mano
pero Edward me tomo de la cintura y me saco raudamente de la consulta, no quise
hacer un escándalo, así que silenciosamente nos dirigimos donde la secretaria y
pagamos la consulta y los exámenes que le había hecho el doctor a Edward.
Aunque trate de
convencerlo, nos dirigimos a la oficina, hoy teníamos mucho trabajo, por lo
menos yo tenía la entrevista con Giuliana así que solo iría a buscar mis cosas
y al fotógrafo que me acompañaría.
Casi no hable con
Edward porque esos celos tan estúpidos que había demostrado hoy sumado a sus
lloriqueos me daban ganas de dejarlos sin bolas, pero cuando pensaba en como
eso me afectaba a mí también me retrataba inmediatamente.
Solo nos despedimos
con un corto beso cuando el ascensor llego a mi piso, me baje Jane ya me tenía
todo listo, pero algo en la expresión de su rostro me indicaba que algo andaba
mal.
- ¿Qué pasa? –
pregunte con miedo, no quería que me dijera que la entrevista se había
cancelado o algo por el estilo
- El fotógrafo –
murmuro y desvió la vista
- ¿Qué tiene? –
había mucha gente que hacía de fotógrafos en caso de emergencia así que no creí
posible que no hubiera uno disponible
- No hay ninguno de
los principales, con tantos reportajes, sabes que hemos estado todos con mucho
trabajo, así que los fotógrafos principales están todos ocupados y yo no sabía,
así que pedí otro nuevo y…
Hablo tan rápido
que apenas me dio tiempo de procesar todo.
- Bien… entonces…
¿Enviaron a uno?
- Si – bajo la
vista y se revolvió el cabello – pero te juro que yo no lo pedí
- Calma Jane – le
sonreí – no tiene nada de malo mientras haya un fotógrafo, en todo caso no es
tu culpa… y bien, ¿Quién es mi fotógrafo?
- Yo
No necesite girarme
para saber porque Jane estaba tan apenada, entrecerré los ojos y vi como Jasper
me regala una estúpida sonrisa.
- Bien – tome el
bolso que me había preparado Jane – estamos a tiempo de llegar, así que vámonos
Sabía que si decía
cualquier cosa extra se prestaría para algo más, así que como esto era lo que
había, decidí dejar todo en el ámbito profesional.
Nos subimos al
ascensor y ninguno dijo nada, cuando llegamos al estacionamiento me di cuenta
que había traído el auto de Edward y dudo mucho que le gustara saber que Jasper
se había subido a él, mire a mi ex novio y comprendió todo cuando me vio mirar
el volvo de Edward porque en seguida camino hacia su auto.
Nos subimos y en el
camino mantuvimos una tranquila charla sobre lo que trataba el reportaje, lo
haríamos en el muelle para que las fotos salieran mas naturales, saldría una o
dos pero era importante que salieran bien.
- Parece que los
deportes están en picada – comento cuando ya nos habíamos bajado
El restorán donde
haríamos la entrevista ya estaba disponible así que nos sentamos a esperar a
Giuliana .
- ¿Por qué lo
dices? – aunque no quería entablar una charla con él, tampoco sería una
descortés
- Porque hay poco
trabajo en la sección, por eso me designaron de fotógrafo
- Pero tú eres
fotógrafo – cuando estábamos juntos recuerdo que me conto que había hecho
varios cursos de fotografía
- Si, por eso y
porque me toco contigo es que no me quejo de este cambio
Me sonrió y preferí
desviar la mirada, porque algo me indicaba por donde venia, gracias al cielo
Giuliana llego y no tuve que contestarle nada.
La verdad es que
era muy simpática, contesto a todas mis preguntas y compartió muchas de sus
experiencias como entrevistadora conmigo, había tenido la oportunidad de
entrevistar a muchos famosos y eso era algo que se notaba que le encantaba.
- Definitivamente
lo mejor es estar en la alfombra roja – sonrió
- ¿Alguna vez
alguien te ha recriminado alguna mala critica?
Yo acostumbraba a
ver E! y sabia que en algunos programas destrozaban los atentos o hasta se
burlaban de algunas travesías de los famosos y siempre me pregunte como seria
verlos después de eso.
- La verdad es que
si – me sonrió – peor así es el negocio, generalmente a ellos no les gusta que
le digan que se ven mal o que han hecho el ridículo, pero si salen de fiesta de
noche y golpean a alguien no es mi culpa, yo solo lo informo y opino, en cuanto
a Fashion Police es más complicado porque comentamos después de que ya han
pasado por la alfombra roja y cuando es temporada de premios en pocas semanas
tengo que volver a verlos, pero como yo entiendo su trabajo ellos deben
entender que este es el mío
Off The Record me comento algún
que otro chismecillo reciente, de verdad que habían muchas cosas en la vida de
los famosos que no se sabían, pero lo que más me sorprendió es que muchos de
los famosos más codiciados y asediados por el sexo opuesto, en realidad eran
homosexuales, habían muchos rumores pero que sin pruebas era imposible lanzar,
eso sería muy irresponsable, ese ya era el trabajo de los Paparazzi así que
solo tendría que mencionarlo en mi artículo.
Jasper tomo algunas
fotos comiendo, otras de nosotras hablando y algunas de Giuliana sola.
Cuando me di cuenta
de la hora me fije que ya había pasado la hora del almuerzo, habíamos estado
toda la mañana en la entrevista así que con Jasper nos volvimos enseguida,
quería ver si alcanzaba a escribir un poco hoy antes de irme a casa.
Edward aun no me
llamaba, pero sabía que se enteraría de que estaba con Jasper y tendría que
poner todo de mi parte para no golpearlo.
Creo que nunca en
mi vida había querido golpear tanto a alguien como hoy a Edward Cullen.
- Fue Alice – deje
de sonreír y mire a Jasper que me miraba fijamente
- ¿Qué?
- Ella es la que
les está mandando las fotos
- ¡¿QUE?! – si era verdad
no era algo que me sorprendiera
- Estoy seguro que
es ella
- ¿Y tu como sabes
esto de las fotos? – lo mire con los ojos entrecerrados, tampoco confiaba tanto
en él
- Bella – sonrió
con ganas – todos en Almost Angels lo saben, la Gossip Girls de la oficina se
encargo de contarnos
Claro, como no se
me había ocurrido eso, ahora todos sabían que Edward y yo estábamos siendo
chantajeados por un loco, que según Jasper y yo, por supuesto, creíamos que era
Alice.
- Yo también creo
que es ella
- Tengan cuidado –
se paro en un semáforo y me quedo mirando – está loca
- Eso también lo sé
– sonreí al recordar sus gritos en la cárcel
- Bells yo…
- Llegamos – antes
de que dijera nada mas salte del auto
Por segunda vez en
el día la suerte me salvaba, pero ni bien baje me encontré con Edward
esperándome, estaba serio pero no furioso como me imaginé encontrármelo.
- Hola – murmure.
De reojo vi como Jasper entraba a las oficinas sin voltearse a vernos
- ¿Cómo te fue en
la entrevista? – no se veía tan molesto, y tampoco es que tuviera motivos
- Bien – ensanche
mi sonrisa – ¡Fue genial!
- Me alegro mucho –
me sonrió aun con más ganas - ¿Almorzaste?
- No, pero no tengo
mucha hambre – después de todo habíamos comido mucho durante la entrevista
- Yo no he comido…
¿Me acompañas? – extendió su brazo que no dude en tomar
- Por supuesto
Nos dirigimos a un
modesto restaurant que estaba cerca, así que fuimos caminando, como ya era algo
tarde no tardaron en darnos una mesa, a pesar de que no tenía mucha hambre aun
así pedí una ensalada.
- ¿Cómo te has
sentido? – pregunte mientras esperábamos nuestra comida
- Excelente, fuerte
como un toro
- ¿Te llamo el
doctor?
- No – aunque
frunció el ceño no agrego nada más
- Eso es algo bue…
No pude terminar mi
frase porque su celular nos interrumpió.
Por lo que pude
entender era el doctor, sobre todo cuando me rodo los ojos, escucho atentamente
y con un rostro cansino, pero en un momento no se qué le dijo que Edward quedo
duro, estaba que revoloteaba en mi silla, Edward seguía pegado al teléfono y no
me decía nada, para mi fueron horas pero en unos segundos corto después de un
“estaremos ahí a las 7”.
- ¿Qué…? – ni
siquiera podía hablar de lo fuerte que galopeaba mi corazón
- Estas embaraza –
murmuro al tiempo que un par de lagrimas rodaban por sus mejillas
aaaahhhh!!!!! no me canso de volver a leerla.... jajajaja
ResponderEliminarme encanta...
plis que siga el de RESISTE siiiii????????????
besos JOHA.......
YA LO SABIA JEJEJEJEJE
ResponderEliminarIO CNDO ESTUVE EMBARAZADA NO SE SI
EL PAPA DE MI NENE TUVO ACHAKES PERO MI SISTER SI JAJA