miércoles, 10 de noviembre de 2010

Siento - Capitulo 4


Cuarto capitulo, disfrutenlo y espero sus comentarios!!

Summary: ¿Eso es lo que quieres? – asentí por miedo a que no me salieran las palabras – Bella… dime que no me quieres – se acerco mas a mi cuerpo hasta dejarme atrapada entre el lavamos y su perfecto cuerpo. ADVERTENCIA, contiene material para mayores de edad.

Capitulo 4


Bella POV

Los primeros rayos del tenue sol del Forks se colaron por mis delgadas cortinas, pareciera que me daban la bienvenida a lo que seria un gran día, quizás el mejor día de mis 16 años, hoy me entregaría al amor de mi vida, y lo mejor de todo es que sé que es la decisión correcta.

Me refregué los ojos, respire hondo y me salí de la cama, todos los sábados mi papá y mi mamá visitaban a mis abuelos y hacían las compras, Charly trabajaba mucho, no por nada era el jefe de la policía de Forks y mi mamá, bueno, Renné es caso aparte, ella no puede hacer casi nada sin Charly, o sea de poder puede, pero nunca quiere.

Bueno, como todo sábado por la mañana la casa era entera mía, ¿Mañana?, creo que me confundí, en cuanto mire el reloj que colgaba en mi cuarto me di cuenta que ya era medio dio, eso significaba que mis padres estaban por volver, rápidamente me vestí con lo primero que encontré, ya después de almorzar me arreglaría mi Gran Cita de esta noche.

El resto de la mañana y principio de la tarde fue de lo mas normal, nada digno de mencionar, quizás solo una cosa, mi novio no me había llamado ni una sola vez, ¿será que se arrepintió de lo de esta noche?, aleje lo mas rápido posible esas ideas de mi cabeza y comencé a arreglarme, tenia dos horas antes de la hora en que quedo en pasar por mi Emmett.

Entre en la ducha y deje que el agua recorriera mi cuerpo y destensara mis típicos nudos del cuello, me depile con mucha precisión, y volví a repetir por si acaso, me lave con mucho cuidado mi cabello, asegurándome de dejar ese aroma que tanto ama mi novio, cuando ya estaba lista, corte el agua y me envolví en mi toalla, al llegar a mi cuarto comencé con mi secesión de cremas corporales, las adecuadas para cada área, la parte mas fácil fue la de la ropa interior, hace una semana que había comprado el conjunto, iba pasando por una tienda cuando lo vi, en seguida me recordó a Emmett, el siempre decía que el rojo era el color que mejor me quedaba, así que compre unas bragas con un corpiño muy provocadores del tono rojo pasión mas fuerte que había. Para no desentonar la ropa interior elegí un sencillo vestido rojo, como ya dije antes, aunque me encanta verme bien, no exagero con la ropa, el vestido me llegaba arriba de la rodilla, con un poco de pliegues, sin pabilos y el escote en forma de corazón, a la cintura se ataba un pequeño lazo de la misma tela para darle forma, la verdad es que me veía bastante bien. Esta vez decidí amarrar mi cabello con unas horquillas dejando algunos mechones sueltos, solo para darle forma a mi rostro, me maquille tenuemente pero con cuidado y en cuanto a los zapatos, elegí unas puntillas del mismo color del vestido, ya estaba casi lista cuando mi madre llamo a mi puerta.

- Bella – asomo la cabeza por la puerta – ya llego Emmett – su rostro cambio a uno de sorpresa cuando me vio

- Ya voy mamá – agarre un sencillo colgante, imitación de perlas y lo puse en mi desnudo cuello, hacia perfecto juego con los aros de perla – bajo enseguida – le volví a repetir para que bajara, pero seguía ahí, de hecho abrió por completo la puerta y entró - ¿Pasa algo mamá? – ya estaba lista así que dirigí toda mi atención a ella

- Hija – pareciera que pronto iba a llorar, pude ver como sus ojos se comenzaban a llenar de lagrimas… o no… se dio cuenta… se dio cuenta que me entregaría a Emmett, ¿Y si no me deja salir? ¿Qué hago?... negarlo, siempre es mejor negarlo todo, no, la verdad por delante, después de todo no es nada malo.

- Mamá – puse mi mejor sonrisa de relajo – ya es tarde… Emmett…

- Lo se – me sonrió – es buen chico – se me acerco y tomó mis manos – cuídate ¿si? – tomó mi atónito rostro y me beso ambas mejillas – estas hermosa hija… disfruta mucho – una sonrisa picara cruzo su materno rostro y me dio la confianza que me faltaba, mi madre sabia que le entregaría mi virginidad a mi novio y me apoyaba

- Gracias – le sonreí sinceramente esta vez – ahora si me voy – la bese en la mejilla y salí del cuarto

Cuando llegue a la sala vi algo que me desconcertó un poco, Emmett, mi novio dos años mayor que yo, estaba sentado en el sofá, erguido totalmente y como sus manos juntas y apretadas, clara señal de que se estaba muriendo de nervios, creo que hasta yo estaba mas relajada.

- Amor – me acerque a él y solo cuando le hable notó mi presencia – lista – le sonreí cerca de su rostro, no lo deje reaccionar y junte nuestros labios en un casto beso

- Amor – me miro y sonrió – estas hermosísima mi Bella… bellísima – se levanto del sofá y tomo mi mano dándome una vueltita

- Bueno, bueno… ya fue mucho ¿No? – entraron a la sala mi padre con mi madre abrazados

- Si Charly… pero no puede negar lo hermosa que se ve tu hija – Emmett debe de ser el único que no teme que mi padre cargue una pistola siempre con él

- Ya… - corto el tema mi papá y se paso la mano por el cuello – no quiero… bueno – me miro – estas hermosa hija – miro a mi novio – y tú – lo apunto con un dedo – cuídala mucho y tráela sana y salva a casa – después le sonrió, mi padre quería mucho a mi novio, sobre todo porque no trataba de congraciarse siempre con él como la mayoría del pueblo

- Como siempre Charly – tomo firmemente mi mano – familia – les sonrió a mis padres – nos retiramos

- Adiós – alcancé a decir antes de ser arrastrada por mi novio

- Tranquila amor – me sonrió Emmett cuando ya estábamos adentro del auto, yo no pude mas y solté una sonora risa - ¿Qué? – me miro con esos ojitos de nenito que tanto amo y deje de reír

- Emm… me dices que este tranquila cuando eres tú el que no esta tranquilo… si no estas seguro… - repetí las palabras que tanto me dijo él

- ¡NO! – soltó de golpe – claro que estoy seguro… pero es que es diferente

- ¿Diferente como?

- Diferente – se levanto de hombros y suspiro – cuando yo lo he hecho – apenas y escuche lo ultimo, lo dijo muy bajito – bueno… no me interesaba mucho las chicas… pero tú…

- Soy diferente – le complete la oración

- Exacto – me sonrió y tomo mi mano – y te amo – dirigió mi palma a su boca y la besó – por eso… tengo miedo de no ser bueno… o sea de no cuidarte

- ¿Me amas?

- ¿Y tu me escuchas? – encare una ceja y se sonrió – te lo acabo de decir y te lo digo siempre… te amo Bella… te amo mas que a nada

- Entonces tranquilo – puse mi mano libre en su rodilla para que se relajara – me cuidaras… lo se

- Gracias

- Emm… a todo esto – baje un poco la mirada - ¿Por qué no me llamaste en todo el día?... no quiero ser una novia controladora ni nada pero se me hizo raro – no pude evitar sonrojarme por lo que acaba de preguntar

- Tranquila – rió y paro el auto en una especie de bosque – ahora vas a saber porque no te pude llamar

Emmett POV

Estaba de verdad muy nervioso, ni siquiera en mi primera vez me sudaron tanto las manos, debe de haber sido por todo el alcohol que tenia en mi sistema en ese momento, pero ahora no iba a ser así, iba a estar lucido para darle lo mejor a la mejor. Me baje del auto y como me enseño mi madre le abrí la puerta a mi novia, la tome fuerte de la mano y nos dirigí a la pequeña cabaña, esta cabaña era de mi familia, la usábamos cuando acampábamos o cazábamos en el bosque, creí que seria mejor un lugar familiar donde nadie nos interrumpiría, llegamos a la entrada y pude ver la sorpresa en el rostro de mi Bella al recorrer el lugar.

Por eso no la había podido llamar, me había pasado toda la tarde decorando y haciendo mas acogedor el lugar, quería que todo fuera perfecto para mi niña, prendí temprano la chimenea para que estuviera calido, el frío del bosque era muy duro y lo que menos quería es que Bella se congelara, aunque eso no iba a pasar, puse velas aromáticas en los lugares esenciales, algunas flores para hacer mas acogedor el lugar, en el cuarto cambie toda la ropa de cama y también amenicé un poco el lugar, la cena que estaba sobre la mesa al lado de la chimenea la había encargado y traído antes de pasar por Bella, no necesitaba calentarse así que estaba todo en su lugar.

- Emm – me soltó la mano y siguió mirando el lugar – es… precioso… ¿Lo hiciste tu? – me miro con sus ojitos al borde del llanto

- Si amor – la tome de la cintura y la apegue a mi cuerpo, no me pude contener y la bese – quiero que todo sea perfecto para ti

- ¿Cocinaste? – vio la comida y me miro sorprendida

- No… no puedo ser perfecto en todo – me reí – la encargué

- ¿Hay que calentarla?

- No… se come fría – un mechón rebelde le había caído por el rostro así que lo acomode detrás de su oreja

- Que bueno

No supe mas, su boca estaba sobre la mía pidiendo permiso para que se lengua entrada a jugar con la mía, me dejé llevar por el momento y la apegue mas a mi, en cuanto sentí su bien formado cuerpo junto al mío, mi erección comenzó a crecer y ella lo noto cuado se refregó en ella, eso me volvió loco y la alce para que enrollara sus piernas en mi cintura, así nos dirigí al cuarto, solo la solté cuando tuve la cama frente a mi, la deje suavemente en ella y por fuerza mayor tuvimos que romper el beso.

La mire por unos segundos y pensé con claridad, esta seria su primer vez, tenia que hacer que estuviera muy mojada antes de penetrarla, así quizás le dolería menos, me puse sobre ella, y cuando pensó que la iba a besar en sus carnosos labios, desvié los míos y los dirigí a su cuello, comencé a bajar hasta el nacimiento de sus bien formados pechos, el escote del vestido era perfecto para mi labor, sin mucho esfuerzo le baje el vestido para encontrarme con una delicia en rojo, el encaje de su corpiño dejaba ver muy claramente la dureza de sus pezones, sin dudarlos solté el broche que los sostenía por delante y me devoré su seno izquierdo, para no crear una preferencia, con mis ágiles dedos empecé a estimular el otro, los gemidos de mi niña me encendieron aun mas, ya mis pantalones no iban a aguantar mi erección, cuando Bella arqueo su espalda para darme mejor acceso, cambie de seno para emparejarle un poco el placer.

- Emm… me en..can..ta.. – le vi el rostro y tenia los ojos blancos de placer

Deje sus pechos para terminar de bajar su vestido, se lo quite con tranquilidad y cuidado, cuando llegue a sus pies la despoje de sus tacones también, la quería desnuda por completo, ya solo le quedaban las sexys bragas que delataban su gran excitación.

- Emm… mu..cha ro.. pa – como pudo se incorporo y se puso sobre mi

Con dedos muy seguros comenzó a desabrochar mi camisa, el tenerla desnuda y sentada a horcanjas sobre mi, no estaba ayudando a mi autocontrol, mi erección iba en muy mal camino y ella lo noto, guió sus manos hasta mi pantalón y lo desabrocho rápidamente, cuando ya estuve libre de mi tortura, comenzó a frotarse sobre él solo nos separaba su delgada ropa interior, no puede mas y nos voltee, esto era sobre ella no sobre mi.

- ¿Qué.. no te gusto? – parecía contrariada

- Amor… si seguías así se iba a romper las bragas para entrar en ti de golpe y no es lo que quiero… quiero que disfrutes – le sonreí para darle confianza

Sin mas empecé un nuevo camino de besos desde su cuello hasta la gloria, llegué a sus bragas y las saque con cuidado, aunque prácticamente estaba estilando, aun así quería que alcanzara un orgasmo antes de entrar en ella, la bese por los alrededores y al oírla gemir y suplicar no aguante mas y la devore, era el mejor manjar, nunca le había hecho esto a nadie, pero eran cosas nuevas las que quería compartir con mi niña.

- Emm… mas… o si… sigue…dale…

Al verla retorciéndose de placer quise darle mas así que dos de mis dedos acompañaron a mi lengua en el trabajo de darle placar, mientras estimulaba su clítoris con mi lengua, agregue otro dedo a su sexo, ahora tres de mis dedos mas largos la penetraban, quise que fuera mi miembro el que estuviera ahí, estar dentro de ella era el mejor placer del mundo.

- Ohhhhhh… yaaaaaaa… casi… siiiiiiii….. dale…. Mas fuerte Emm….

- Vamos Bella – la mire y hable como pude – córrete bebé… córrete para mi… quiero probarte

Sentí como sus paredes se tensaban así que aumente al máximo el ritmo de mis dedos y mi lengua, justo cuando grito mi nombre, me deleite con el manjar de su orgasmo, su sabor no tenia comparación con nada del mundo.

- Ohhh Emm… eso fue – se puso sus manos sobre su rostro – genial… fue…

- Amor… - me acerque hasta su boca – eres deliciosa – pase mi lengua por mis labios para saborearla mejor, pero lo que hizo me sorprendió, me acerco y me beso con furor y urgencia

- Tienes razón… es rico – ahora ella paso su lengua por sus labios – pero quiero conocer tu sabor – se iba a poner sobre mi pero la detuve

- Después… ahora solo disfruta

Volví a atrapar sus labios con los míos, mientras me acomodaba en ella empecé a frotar mi pene en su entrada, sentí su humedad así que ya estaba listo para adentrarme en ella cuando recordé lo mas importante, el condón, me separe del beso y tome el que había dejado sobre la mesa en la tarde, estaba abriéndolo cuando mi niña me lo quito.

- Déjame a mi – lo abrió de una y se incorporo a horcanjas sobre mi, se agacho para dejar su boca a la altura de mi muy erecto pene, sus ojos negros de placer su cruzaron con los míos mientras sacaba su lengua y me lamia desde la base hasta la punta, para finalizas con un tierno beso en ella.

- ¡Mierda! – tuve que aguantarme las ganas de pedirle mas cuando vio mi reacción rápidamente puso el condón y se volvió a mi

- Listo – me sonrió y beso la mejilla

- Eres mala mi niña…

La tome firmemente de las caderas y la volví a poner bajo mi cuerpo, le tomé el rostro con ambas manos, nuestros ojos se conectaron de una manera simplemente magnifica, la bese esta vez con mucho amor, lentamente comencé a adéntrame en ella, no le solté la boca por nada del mundo, cuando rompí su delicada tela me separe del beso para verla mejor, me quede quieto adentro esperando que su cuerpo se acostumbrara a mi miembro.

- Amor… ¿Estas bien? – mi voz era entrecortada por la estreches de su sexo

- Si… eres tan grande… o dios… muévete – levantó las caderas para demostrarme lo que quería

- No necesitas pedirlo dos veces

Comencé con los movimientos siguiendo todas las ordenes que salían de los labios de mi niña, si me pedía mas le daba mas y si me pedía mas fuerte se lo daba mas fuerte.

- Ohhh… esto…. Es… genial…. Si… sigue… amor

- Te amo Bella – seguí moviéndome con mayor rapidez

- Dale Emm… ya casi… acabo… vente… conmigo… amor…

- Si… ya… voy… o dios… estas tan estrecha… dios Bella…

- Y tu… tan… grande… ohhh… amor… sigue…. Casi….

No pudimos continuar porque el orgasmo nos sorprendió al mismo tiempo, con la culminación de nuestros nombres llegamos al placer máximo, el clímax del acto, el mejor orgasmo, no me quise salir de ella enseguida, necesitaba sentirla mas.

- Ohhh mi niña… fue genial – la sostuve abrazada y con mi cabeza apoyada en su hombros

- Amor – se separo de su hombro y me miro a los ojos – creo que ya no soy una niña

- Siempre – la bese en los labios – siempre serás Mi niña… Te amo Bella

- Te amo Emm, ¿sabes lo que dicen? – yo solo negué – que la practica hace al maestro… ¿Estas listo para una segunda ronda?

- No lo se… - presione mi pene que aun estaba dentro de ella para que viera como comenzaba a levantarse nuevamente - ¿Qué dices tu?

- Que esta vez – levanto las caderas para sentirme mejor – me toca a mí arriba.


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Besos, Joha!

5 comentarios:

  1. me encanto!! la verdad que este fic es uno de mis preferidos!
    ya kiero ver nuevamente el encuentro con edward!!!

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  2. haaay y yo que pense que cuando entraran a la cabaña, iva a estar edward de mal tercio y tal vez hasta se abria cenado la comida que encargo emmett, pero nooo bellita y su emmett tuvieron su cita deseada ¬¬, ok aunque me encanta este emmett ya quiero ver que hacer edward. me gustaaa mucho la historia, cuidate joha que estes bien.

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  3. haaay y yo que pense que cuando entraran a la cabaña, iva a estar edward de mal tercio y tal vez hasta se abria cenado la comida que encargo emmett, pero nooo bellita y su emmett tuvieron su cita deseada ¬¬, ok aunque me encanta este emmett ya quiero ver que hacer edward. me gustaaa mucho la historia, cuidate joha que estes bien.

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  4. haaay y yo que pense que cuando entraran a la cabaña, iva a estar edward de mal tercio y tal vez hasta se abria cenado la comida que encargo emmett, pero nooo bellita y su emmett tuvieron su cita deseada ¬¬, ok aunque me encanta este emmett ya quiero ver que hacer edward. me gustaaa mucho la historia, cuidate joha que estes bien.

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  5. me encanto!! la verdad que este fic es uno de mis preferidos!
    ya kiero ver nuevamente el encuentro con edward!!!

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