
Hola!!. Chicos, aca les dejo el cap completo :(. Besos!!
Summary: Sin esperar nada mas le dio una rápida apretada a mi entrepierna, la que aunque no se puso dura comenzó a reaccionar, enseguida se giro como si no hubiera pasado nada y salio de mi casa… Creo que si tendré que aprender a Resistir. ADVERTENCIA, contiene material para mayores de edad.
Summary: Sin esperar nada mas le dio una rápida apretada a mi entrepierna, la que aunque no se puso dura comenzó a reaccionar, enseguida se giro como si no hubiera pasado nada y salio de mi casa… Creo que si tendré que aprender a Resistir. ADVERTENCIA, contiene material para mayores de edad.
Gemidos, mordiscos,
palmadas en el trasero, embestidas feroces, embestidas calmadas, el 69, a lo
misionero, por detrás, piernas al hombro, mas gemidos, mas mordiscos y un par
mas de palmadas… no sé, en algún punto perdí la cuenta. Nuestra noche de bodas
se alargo a un día y a una noche más porque las pocas horas que ofrecía la luna
no nos alcanzan para demostrarnos nuestro amor, aunque para ser sincero tampoco
alcanzaba el sol, necesitábamos una vida… menos mal que la teníamos.
A penas y pedimos
comida pero solo lo hice porque Bella estaba muriéndose de hambre y no quería
verla desfallecer.
Menos mal que esto era
Las Vegas y a nadie se le ocurría molestar a una pareja de recién casados
porque es muy probable que si alguien hubiera tocado nuestra puerta hubiera
salido con un cenicero clavado en la frente.
La espalda desnuda de
mi bella esposa me hacía difícil la tarea de tener que despertarla per ya era
hora de volver, no porque quisiéramos ni mucho menos pero si teníamos
responsabilidades laborales y con nuestra familia porque podía apostar mi vida
a que estaban vueltos locos tratando de saber de nosotros. Mierda, llevábamos
solo tres días en Las Vegas pero para mí ya era un mundo, es que estar
encerrado con Bella, solo amándonos y estando juntos era algo inigualable, acá
no era como en casa, esta habitación de hotel amortiguaba toda la realidad
expulsándola fuera de nuestro perímetro para que así todo fuera más fácil y
placentero.
Ahora, cuando llegáramos
de vuelta a Nueva York tendríamos que enfrentarnos con toda nuestra familia,
quizás habrían un par de gritos y de reproches y quizás en algunos puntos
tendrían razón pero nada de eso me importaba, tenía el cuerpo desnudo de mi
esposa a mi lado luego de la noche de bodas más largas del mundo… estábamos en
la ciudad del pecado así que ni siquiera me preocupaba el hecho de haber visto
antes de salir la cajita con las pastillas anticonceptivas de Bella en el baño.
Si, podría habérselas traído pero algo me decía que nuestro primer hijo seria concebido
la noche que nos casáramos, porque claro, para la mayoría puede ser una
reverenda estupidez pero para mí no lo era, no era lo mismo saber embarazada a
Bella estando ya casada conmigo, así es como tenían que ser las cosas y aunque
no hubieran resultado así me alegra que… ahora que ya estábamos oficialmente
casados no descansaría hasta que mi semilla estuviera echando raíces en su
interior aunque tuviera que mantenerla atada a la cama y con las piernas
arriba.
- Deja de sonreír –
inmediatamente borré mi sonrisa para voltear a verla pero ella seguía de
espalda y con la cabeza enterrada en la almohada – se que dejaste mis pastillas
en Nueva York así que no te pongas en plan de macho alfa para embarazarme
Quise decirle que estaba
equivocada pero en una mierda de mentira, quise decirle que lo sentía pero no
era así ni cercanamente, quise decirle que… nada, no podía decirle nada porque
simple y llanamente no había una mierda que decir a mi favor solo la verdad y
es que quería verla con su vientre redondo lo más pronto posible.
- Tampoco te hagas el
mudo – por fin se volteó un poco para poder verle el rostro – tenemos una cita
con mi ginecólogo para mañana… le dije que intentaremos tener un hijo y…
Si, las palabras no salían
de mi boca pero mierda que si funcionaban mis reflejos. Antes de que dijera
“Hola amor” ya estaba sobre ella devorando su boca como si mañana el mundo se
fuera a acabar, invadí buscando su lengua la que encontré en un santiamén
logrando que se enredara con la mía para así hacer que nuestras hormonas se
dispararan en todas direcciones aunque a la vez en la misma… lujuria.
Estábamos desnudos, lo
estábamos desde hace dos días por lo que en cuanto mi cuerpo se posó sobre el
suyo mi polla no pudo mantenerse calmada y se levantó buscando su lugar feliz
dentro de mi amada esposa. Me removí tratando de crear fricción que no tardó en
llegar y enviar miles de corrientes eléctricas por todo mi cuerpo, los gemidos
de mi Bella tampoco se quedaban atrás. su voz salía fuerte y clara sin
cohibiciones estúpidas de por medio haciendo que todo fuera aun mas excitante.
- Edward… yo… solo
entra… por favor
- ¿Por qué? – me roce más
duro logrando que mi polla doliera por la fricción - ¿Por… que quieres que
entre?
- ¡Mierda Edward! – rugió
cerrando los ojos y enterrando sus uñas en mi espalda. Al contrario de lo
lógico, no me dolió, solo me calentó aun mas – Yo… ¡MIERDA!... solo quiero que
me folles duro
- ¿Duro? – lo miré
directo a los ojos, cuando asintió entré en su cuerpo sin piedad - ¿Qué tan
duro? – me mantuve quieto sin moverme aunque tuve que concentrarme para no
correrme antes de tiempo
- Solo… ¡DURO!
Su gritó resonó
haciendo temblar la cama y creo que hasta un poco las paredes. Estaba demasiado
entusiasmada y yo ya había conseguido prenderla al máximo así que salí de su
dulce coño y volví a entrar con mucha fuerza pero la maldita posición del
misionero no me dejaba haciendo como era debido por lo que haciendo uso de su juventud
y agilidad, tomé sus piernas y las doble poniéndolas sobre su vientre, era una
posición algo extraña pero ¡Mierda! que estaba llegando profundo. Seguí
embistiendo sin aminorar el ritmo cuando de pronto sentí que los gritos de mi
esposa se incrementaban de manera descomunal, a la siguiente embestida me di
cuenta porque… había encontrado su punto G.
- Edward!!!!!!! –
alargó la d lo mas que pudo sosteniéndola hasta que su garganta no pudo mas
- Yo… - apreté sus
piernas mas sobre su pecho haciendo que su coño que estrujara lo mas posible -
¡MIERDA!... ME VOY A CORRER
- EDWARD…. YO…
MIERDAAAAAAA
Ninguna coherencia más
que delirio se instauró en la habitación por completo. Ahora estábamos abrazados,
satisfechos, sudados y mas que felices… nada podía mejorar el momento.
- Creo… que puedo
estar embarazada…. ¡Mierda que te corriste fuerte!
Si, parece que si se
podía mejorar el momento. Sonreí como estúpido besando su cabeza y esperando
que mi polla se recobrara para volver a empezar.
.
.
.
- No quiero – sollozó
mi amor cuando el avión se detuvo. Parecía una nenita negándose a desabrochar
su cinturón de seguridad
- Amor – hablé
cancinamente al ver como todos ya comenzaban a sacar sus cosas de los compartimientos
de arriba – debemos bajarnos
- Pero…
- Pensé que estabas
segura de esto – la miré serió y sin ningún atisbo de estar bromeando, no quería
que siguiera con su berrinche
- Y lo estoy
- Entonces párate –
estiré mi mano y no le tomó más que un par de segundos tomarla
- Bien
El camino a casa pasó
entre tembladeras de Bella y conmigo revisando el celular, ya que se me había
ocurrido apagarlo y la mierda estaba rebalsada de mensajes de voz de texto y de
llamadas perdidas, la pobre memoria del aparato se vio sobre pasada y no se me
hubiera hecho extraño que se suicidara.
Alcancé solo a leer un
par de mensajes antes de rendirme y dejarlos ahí, no tenía sentido, ahora solo
estábamos a un par de cuadras de nuestra casa y algo me decía que no estaríamos
solos cuando llegáramos.
Por supuesto que tuve
razón, no solo había alguien, estaban todos.
- Parece que son
síquicos – bufé
- Yo los llamé –
murmuró Bella mientras sacábamos las maletas del auto. Le di una morada para
que me explicara un poco y ella solo se encogió de hombros – estoy feliz amor –
suspiró – pero aun así me parece que debíamos decirles que nos casaron… son
nuestra familia y sé que querrían haber estado ahí – se volvió a encoger de
hombros una vez mas pero ahora dejó caer sus brazos a sus lados con pesadez – así
que pensé en que nos esperaran aquí
Solo le di un beso en
los labios para después entrar a la casa y afrontar lo que se nos venía. Por
supuesto que al principio todo fueron reclamos y un par de gritos, mi madre era
la más exaltada ya que tenia buena parte de la boda planeada así que solo se
calmó cuando le explicamos que aunque ya estuviéramos casados aun queríamos
nuestra celebración religiosa, desde ahí nuevamente fue todo planes y mas
planes. Tal parecía ser que nuestra boda “real” seria en un mes más, en nuestra
corta ausencia de dos días mi madre y mi cuñada se habían encargado de mandar
las invitaciones y de seguir trabajando en los detalles. Le di una mirada a mi
esposa para ver que pensaba ella de todo esto pero estaba mucho más relajada y
solo sonrió y asintió cuando debía, no tenía que ser un genio para saber que no
le importaba como fuera todo, ya nos habíamos casado así que esto solo era algo
más.
- Quiero un vestido
blando – escuche la voz de Bella
- Pero hermana… ya
estas casada y…
- No – interrumpió la
voz de mi madre – el blanco no es solo sobre pureza en el sexo sino de alma y
mi nuera es más que pura de alma… nadie hubiera esperado seis años sin saber
que pasara y mucho menos teniendo 18 años
En ese momento casi
todos volteamos a Bella quien asomó un par de lagrimas por sus ojos.
Yo estaba con mi
padre, James y mi hijo ya que mis suegros aun no volvían de su viaje, les
quedaba una semana aun y dudaba mucho que llegaran antes de tiempo, la última
vez que los vi me di cuenta a la perfección que un tiempo a solas era lo que
necesitaban.
Mi hijo estaba en su
mejor momento con Jane y mi cuñado también lo estaba con Emily, parecía que
después de tanta mierda y vueltas sin sentidos todos estábamos en el lugar
correcto. Comimos todos juntos pero parecía ser que mi madre y Tanya estaban
enojadas con mi esposa, Jane y Emily, no sé bien porque era pero supuse que era
por la boda… tampoco había que ser un genio para notarlo.
- ¿Esme? – mi padre le
dio una mirada a mi madre cuando dejó caer el tenedor con exceso de fuerza
sobre el plato
- ¡Ellas no quieren
una escultura de hielo! – y como si fuera una adolecente apunto a las tres
chicas quienes solo rodaron los ojos
- Amor… - mi padre
quiso poner una mano en su hombro pero mi madre solo le dio una mirada para que
la quitara
- ¡Ya la pedí! –
sollozó – y no se puede devolver
- Oh Esme… yo no sabía
– y ahí va mi esposa. ¿Dónde estaba esa perra de 17 años? Esta chica hacia todo
lo que mi madre quería – pero si ya la pediste…
- Madre…
- No – me apuntó –
ella ya dijo que si
Después de eso solo
podía esperar que terminara el día. No quiero sonar mal, ¡mierda! amaba a toda
mi familia pero somos tantos y cada uno más loco que el anterior que me era
difícil estar completamente tranquilo. Mentira, amaba que nos juntáramos todos,
si, quería que se fueran para estar solo con Bella pero no por ellos, los amaba
a cada uno pero a veces se me hacía difícil tenerlos tanto tiempo en el mismo
lugar.
Ya todos se habían
ido, Gerard no había podido venir porque estaba trabajando así que Tanya fue la
última en quedarse. Algo me pareció raro en ella ya que su ánimo de todo el día
había disminuido considerablemente.
- Bella – mi esposa ya
había comenzado a recoger los pocos vasos que quedaban sobre la mesa de centro
- ¿Podemos hablar?
- Por supuesto – ella
me miró así que no dude en tomar las cosas que tenía en sus manos
Las dejé solas por un
minuto mientras iba a la cocina a dejar todo pero cuando volví estaban solo
sentadas en el sofá así que no dudé en sentarme junto a mi esposa. La mirada de
Tanya seguía siendo extraña y por más que pasaban los segundos no abría la
boca. Le di una mirada a Bella pero ella se veía tan confundida como yo así que
entendí que no nos quedaba más que esperar a que mi cuñada quisiera hablar.
- Bien… esto es
difícil… es algo importante
Ahí supe que esto de
verdad era importante y que como había dicho “Bella tenemos que hablar” yo no pintaba mucho en el cuadro así que
sabiendo cuando estoy de mas decidí levantarme y darles su espacio. Quizás
podría ir a desempacar y ordenar un poco nuestro cuarto que era muy probable
que fuera un chiquero.
- Las dejo solas
- No – negó Tanya
haciendo que volviera a poner mi trasero en el sofá – esto es algo que también
te compete… cuñado – lo ultimo lo bufó. Supongo que aun no se le pasaba el
enojo
- Entonces… – Bella
tomó mi mano apretándola con mucha fuerza, creo que notó que lo que iba a decir
Tanya era algo bastante serio, si hasta yo me di cuenta de eso - ¿Es una mala
noticia?
- Bueno… - el fuerte y
largo suspiro de mi cuñada hizo que mi corazón se acelerara un poco – es algo
bueno pero fue malo en su tiempo, es algo así como que antes era malo y que
ahora es bueno, pero de todas formas depende de ti si es bueno o malo, para mí
por ejemplo…
- ¡Tanya! – interrumpí
sus divagaciones ya que Bella estaba comenzando a respirar más agitada – Por
favor, dinos lo que pasa
- Oh si… bien –
retorció sus manos mirando fijamente a mi esposa – hermana… ¿Recuerdas que te
hablé de ese hermano que tenemos? – Bella soltó jadeó asintiendo. Yo ya suponía
por donde venia la rubia así que ella también debía hacerlo – Bien… hace un
tiempo que estoy tratando de que se venga a Nueva York pero él tiene una buena
familia en Paris y bueno… ahora que cumplió los 18 decidió que quiere
conocernos
- Ohhhh – Bella
asintió pero sin emitir alguna palabra aun - ¿Y… – tosió un poco para aclarar
su garganta que su voz había salido un tanto ronca – cuando vendrá?
- Él ya está aquí… y
quiere conocerte
- ¿Cómo? – otro jadeo
salió del pecho de Bella
- Si… él llegó a Nueva
York ayer por la noche… yo no sabía si traerlo hoy y…
- ¡Pero por supuesto
que debiste traerlo!
Bella se levantó del
sofá y comenzó a pasearse por la sala con las manos en sus cabellos, tiró de
ellos por un momento pero luego comenzó a mover sus brazos de forma graciosa,
se que aun estaba procesando la información y por como la conocía también sabía
que iba a estar por lo menos toda la noche dándole vueltas al asunto.
En todo caso, no
estábamos hablando de cualquier cosa, se trataba de un hermano perdido de su
madre que prácticamente la vendió, ya haber encontrado Tanya hace seis años había sido complicado y
aunque supiera hace un tiempo sobre la existencia de este chico eso no
facilitaba las cosas en gran medida, seguía siendo un chico con la mayoría de
edad recién cumplida a quien su madre también vendió y quien a diferencia de
Tanya y Bella, había encontrado dos hermanas, no una.
- Entonces… ¿Cuándo lo
conoceré?
- Mañana creo que será
lo mejor… él recién llegó anoche y creo que aun se le hace todo muy difícil…
ahora voy a ir a hablar con Riley y…
- ¿Riley? – la
pregunta de Bella tenía un claro toque de emoción
- Si… no estaba segura
de su nombre pero ahora lo estoy… se llama Riley Biers y ha vivido toda su vida
en Paris… es muy lindo – sonrió Tanya – se parece mucho a nosotras
- Pero nosotras no nos
parecemos – Bella apuntó a ambas
- Si que lo hacemos
- ¿Estás bien? –
susurré en su oído
- Mas que nunca
Su cuerpo se acurrucó
junto al mío mientras hablaban de cómo mañana a la hora del almuerzo se
juntarían los tres en un restaurant. Yo sabía que mañana teníamos hora con el
ginecólogo pero no quise decir nada, después de todo no iba a ser tan malo
aplazarla unos días para que Bella pudiera conocer a su hermano. Tanya se fue
unos minutos después y ya estando solos no nos quedó otra que subir, yo ordené
un poco la habitación mientras Bella se bañaba, necesitaba relajar sus músculos
y yo también por eso en cuanto salió entré yo.
Acurrucados en la cama
ni siquiera pensamos en hacer el amor, habían demasiadas cosas en la cabecita
de mi esposa para ello.
- ¿Segura que estas
bien? – besé el tope de su cabeza
- Muy segura – enterró
mas su rostro en mi pecho y suspiró haciéndome un montón de cosquillas –
recuerda que mañana tenemos hora con el ginecólogo
- Pero pensé que la
aplazaríamos
- No – negó también
con la cabeza – nuestra cita es temprano así que nos dan los tiempos
- Bien – sonreí
satisfecho. Bella ya se estaba quedando dormida así que sin soltarla me estiré
para apagar la luz – ahora duerme amor – bese una vez más su cabello – te amo
- Yo también te amo
Cuando la mañana llegó
Bella ya estaba de pie, ordenó un poco el desastre que era la casa, cocinó el
desayuno, regó las plantas y creo que estuvo a punto de bañarme y vestirme. Sé
que su estado anímico no era solo por su hermano, también lo era por nuestra
visita médica, ella se moría por ser madre y solo ahora me daba cuenta que
quizás mis “nadadores” ya no fueran tan rápidos como antes, no había querido
pensarlo mucho pero me daba pánico no poder embarazarla, antes de que empezara
nuevamente con mis cavilaciones estúpidas deseche cualquier idea loca y me
concentré en el día que nos esperaba.
Comimos temprano y
decidimos que lo mejor era salir de la casa, quizás si teníamos suerte podían
atendernos antes.
- Hola… mi nombre es
Isabella Swan y tengo cita con el doctor Adams
- Oh si – la chica
detrás del escritorio escribió algunas cosas en el computador e imprimió un
papel que le dio a Bella para firmar – firme aquí
- Bien – mi esposa
firmó y se lo entregó
- Tomen asiento – nos sonrió
a ambos – el doctor la llamara en unos momentos
Nos sentamos junto al
resto de mujeres embarazadas esperando por nuestro turno. Mis nervios habían
pasado y creo que los de mi mujer también ya que se veía bastante cómoda.
- Sabes que estamos
juntos en esto ¿no?
- Lo sé… solo me preocupa
un poco el hecho de que he tomado pastillas desde los 15… quizás eso…
- Es un mito – me
encogí de hombros – una vez vi un reportaje y dijeron que era un mito, las
pastillas no hacen más difícil el embarazarse cuando se dejan
- Bien – sonrió ahora
relajada por completo
La rodee con mis
brazos y acerqué su cuerpo aun mas al mío pero no alcanzamos a estar en esa
posición mucho tiempo ya que muy pronto nos llamaron. Antes de entrar a la
consulta nos besamos en los labios y nos sonreímos, estábamos juntos en esto
pasara lo que pasara.
- Bien… Isabella – el
hombre mayor comenzó a leer el expediente que tenía en sus manos – veo que
dejaste las pastillas anticonceptivas… supongo que están buscando un bebé
- Si doctor – le
asintió ella – y por eso hicimos esta cita, para asegurarnos que todo esté en
orden
- Bien – el doctor se
paró y nosotros lo imitamos – recuéstate en la camilla
Bella lo hizo para que
el hombre le hiciera unos exámenes rápidos, palpó su vientre, sus pechos, tomó
su presión y creo que escuchó sus pulmones, nada fuera de lo normal cosa que me
extrañó bastante. Bella se veía igual de confundida que yo, ni siquiera la
habían hecho ponerse una de esas raras batas.
- Bien Isabella… a
simple vista te ves muy saludable pero necesitaré exámenes…
- Ohh, bien – se sentó
en la camilla y yo ayudé a que se bajara - ¿Qué exámenes?
- De sangre más que
nada… y un Papanicolaou
Ella volvió a asentir
y yo ni siquiera quise preguntar cómo era el Papanicolaou, algo suponía así que
era mejor permanecer en la ignorancia.
- Como aun no sabemos
si estas embarazada ya te recetaré estas pastillas – el hombre comenzó a
escribir en su recetario con mucha energía – las primeras son solo vitaminas y
las segundas son hormonas extras, nada es dañino para ti ni para el bebé en el
caso de que ya estés esperando
- ¿No puedo saber
ahora si ya estoy embarazada?
- No… lo siento… palpé
tu vientre pero no encontré ninguna protuberancia… yo creo que aun no lo estas
pero para estar seguros es el examen de sangre… cualquier tratamiento que se
empiece debe ser con la seguridad de que nos hay gestación
- ¿Yo no debo hacerme ningún
examen?
Ok, no me iba a
torturar con estupideces pero tampoco era tonto, habían grandes posibilidades
de que yo tuviera más problemas que Bella.
- No… ella recién dejó
las pastillas hace – dio vuelta una hoja del expediente – una semana… así que
aun es muy pronto para cualquier pronostico
- Bien… entonces me
debo tomar las pastillas y hacerme el examen de sangre ¿no?
- Y el Papanicolaou –
agregó el medico
- Entiendo
Nos despedimos del
hombre y salimos a pedir las horas para los exámenes, recién se los harían en
tres días así que la prisa no tenía sentido. Ya era cerca de la hora de almuerzo
y Tanya había llamado para decir que se encontrarían en el restaurant que
estaba debajo de su edificio por lo que pasé a dejarla ahí antes de irme al
Centro.
- ¿Vas a estar bien? –
ya estaba estacionado
- Si… prometo llamarte
por cualquier cosa
- Bien – me acerqué a
besarla – solo no le tires todo de una – bromee – tienes mucho que contar de tu
vida así que no abrumes con todo
- Entiendo – rodó los
ojos y no me quedó otra que atrapar su labio inferior para darle un profundo
beso – te amo Edward
- Yo a ti también pero
si no te bajas ahora me multaran
- Bien – respiró hondo
botando el aire exageradamente – lista
Me sonrió antes de
bajarse del auto. La vi entrara al restaurant y solo cuando me saludó con la
mano fui capaz de arrancar.
wow el hermano.... la verdad es que no esperaba que apareciera, debe ser lindo pero con un caracter algo complejo asi como Bella, pero tiene que ser buenito, a estas alturas no puede ser alguien que oscuresca la vida de esta historia.
ResponderEliminarwowwwwww... mmmmm alguien como SETH?? de esa personalidad??
ResponderEliminarjajaj me imagino que bien guapo jajjajaaj ! ohhhhhhhhhhhhh ya se quien es jiji pero no lo dire !! eso quedare entre johha y yo jiji :D
ResponderEliminarmmm joha nos haces pensar jaja capaz que sea un poco alocado como bella.... siempres nos sorprendes joha con quien nos saldras?? espero leer pronto el capitulo
ResponderEliminarahhhhhhhhhhhh nuc!!! xD iba a decir gay para variar los personajes pro carlisle y charlie son gay xD jajajajajajaja nuc nuc
ResponderEliminarahhhhhhhhhhh ya lo quiero conocer xD
ResponderEliminarla verdad no tengo ni idea pero nos mata la curiosidad.....Besos...
ResponderEliminarOMG! Quien sera???? que emocion! espero & subas pronto Joha
ResponderEliminarBesos
AAAHHHHHH!!!!!!!!!! por fin... no sabes lo ansiosa que estaba por leer completito el capitulo y me encanto.....
ResponderEliminarhay un bebe hay yo quiero tengan un bebe pronto asi bien hermoso....
plis no tardes siiiii????????
y tambien con el de CAMINOS ENCONTRADOS estoy que me como las uñas por leerlo completito....
besosss Joha......
2 dias encerrados de luna de miel muy estilo ellos!!! era obvio que la familia se iba a enojar...me encanta la reaccion de esme por la estatua de hielo jaja... yo quiero que bella quede embarazada seria lindo... y me has sorprendido rylie... muy bueno joha como siempre..
ResponderEliminarme encanto esta super :D
ResponderEliminarpor fin va a conocer a su hermanooo
ojala se embarace ;)
que lindo capitulo, me gusto mucho, ojala Bella este embarazada... por Dios Edward no puede dudar de las capacidades de sus "nadadores", me encanto esa parte, me rei mucho....
ResponderEliminarya quiero un bb de ellos pero tengo duda que onda con el hermano ash siempre me dejas con la duda¡¡ pero me encanto gracias¡¡¡
ResponderEliminarme encanto el cap
ResponderEliminarQue rica luna de miel jajaja, se ve que no perdieron el tiempo xD
ResponderEliminarYo tambien quiero un bebe!!!! please no mas drama :P
Y el hermano hay que ver q tal, como reacciona y esas cosillass..
Besos
q chulo!! xD estos dos son dinamita pura :P
ResponderEliminarque buena luna de miel.... pues con Edward no saldria ni del cuarto!! jaja.. que chistoso estuvo este capitulo y super lemmon.. que rica vida de casados.. ojala Bella se embarace prontoo... asi ya no les da tanto el drama xD
ResponderEliminaromgg yo quiero una luna de miel asiiiii !! me encanto el capiiii !! lo ameee !!
ResponderEliminarlos nadadores deben ser de una buena calidad, son de edward no?? aajjajajja
ResponderEliminarlindo cap, ahora a conocer a riley, nada de sorpresas, no lo resisto a estas alturas xd jajaja
puro love!!!
al fin... oie como me a costado leer este cap.. y digo solo este xq esta es una de mis favoritas y llevo como media hora tratando de leerlo y el blog no me deja pero equis... me encanto el cap. al fin se casorin y ya mero llegan los bbs jaja kiero ver a esta bella embaraada y a edward en el proceso pobres...
ResponderEliminarbesos